El Cañón del Sumidero, es quizá, una de las más impresionantes atracciones que atesora México en Chiapas. En sí es un estrecho por el que las aguas del Río Grijalva atraviesan desembocando en el Golfo de México, con gigantescos muros o acantilados que se elevan a más de mil metros de altura sobre el nivel del mar. Para tener la experiencia completa, vale la pena conocerlo tanto por arriba como por abajo, desde los miradores y también a bordo de una lancha. A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber para que tu visita sea una gran experiencia.
Para llegar a este lugar, lo más recomendable es iniciar en
Tuxtla Gutiérrez, la capital del estado. Te recomendamos pasar la noche aquí para después muy temprano salir a
Chiapa de Corzo, sitio desde donde se toma el tour para recorrer el cañón, y donde también podrás visitar la fuente conocida como “
La Pila”, la cual es considerada uno de los monumentos artísticos más importantes de toda América Latina. Admira el
Templo de Santo Domingo de Guzmán, encuentra cultura viva en
los portales y tiendas de artesanías, el camino te guiará hasta llegar al embarcadero, donde podrás comprar tu boleto para el recorrido en lancha. Los vende la cooperativa de la región, el costo es de aproximadamente $200 pesos por persona.
Al recorrer el cañón en lancha,
el paisaje verde te rodea, invitándote a abrir más los ojos y a voltear por todas partes para no perderte ni un segundo del momento. La sensación de sentirte tan pequeño al lado de la madre naturaleza mientras recorres esta especie de arteria gigante es increíble. Eventualmente llegarás hasta la puerta del cañón, misma que aparece en el escudo del estado.
Al seguir avanzando por las verdes aguas y después de observar diversas cascadas, podrás encontrarte con el conocido “
árbol de navidad”, una formación de musgo con 250 metros de altura que tomó esta forma caprichosa, así como al
caballito de mar, una estalactita que cuelga de una de las grandes paredes del cañón.
El recorrido continúa y podrás admirar a los
monos arañas, que pasean de rama en rama, entre ceibas, ocotes y encinos. Es muy emocionante estar a la expectativa para mirar algún cocodrilo o apreciar las aves que vuelan alrededor como
halcones, patos, pelícanos, garza y alguna que otra
águila.
Te conviene conservar la pulsera que te darán en este recorrido, con ella también tendrás acceso a los 5 miradores que fueron construidos estratégicamente para poder apreciar el Cañón del Sumidero desde las alturas, los cuales cuentan además con instalaciones realizar un día de campo. El quinto y último mirador es particularmente especial, pues desde ahí se aprecia una herradura formada por las gigantescas paredes del cañón, pero todos valen la pena de visitar y cada una posee vistas asombrosas.
Cómo llegar
Puedes llegar en tu automóvil tomando la carretera de Tuxtla Gutiérrez hasta los miradores. También en el Museo de Antropología encontrarás el colectivo que te lleva a esta emocionante aventura.