Esta área del estado fue asiento, desde la época prehispánica, de los zoques, quienes otorgaron a su entorno un significado que hizo del paisaje una conexión con las deidades del cielo y del agua, del viento y la tierra. Recorrer los sitios de la geografía sagrada le da un nuevo sentido al viaje por Chiapas. El cerro de La Chumpa en Jiquipilas, el cerro Mactumactzá —vigía de Tuxtla Gutiérrez—, los cañones de Río La Venta y el Sumidero, son refugios sacros cargados de leyenda y devoción.
Durante la época colonial florecieron en el oeste chiapaneco, muchas haciendas ganaderas y agrícolas. Algunas de esas fincas o haciendas, forman parte del turismo rural o turismo de aventura. El Zapote, La Valdiviana, La Providencia y Las Cruces, en el municipio de Cintalapa, son algunas de las que pueden visitarse. Se trata de viejas construcciones, principalmente del siglo XIX, en parte restauradas para el turismo rural, una práctica que poco a poco crece en la entidad chiapaneca.
Las antiguas haciendas o fincas constituyen hitos en la historia de Chiapas. Sus tierras fueron parte del cultivo de añil, maíz, frijol, caña de azúcar y del henequén, producto éste explotado en las décadas finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Los cascos de ellas presentan casonas de amplios corredores, con capillas anexas. La presencia de esclavos africanos en la época colonial, las hizo además lugares de difusión de la marimba, el instrumento emblemático de Chiapas.
En el Chiapas, actual se hablan 12 lenguas indígenas diferentes, cuyos hablantes, además de tener una lengua en común que los identifica y los caracteriza, conservan su indumentaria particular, sus creencias, sus tradiciones y su forma de ser, situación que les imprime singularidad y conforman al país como un colorido y variado mosaico cultural.
En esta área geográfica de Chiapas, predomina uno de los grupos menos estudiados, lo que lo hace aún más fascinante: los zoques, que ocupan la parte noroeste del estado de Chiapas y cuya lengua está desapareciendo por el paso de la modernidad. Las mujeres aun portan la indumentaria tradicional en días especiales, compuesta de una falda larga colorida o a cuadros, de acuerdo a la región y un huipil o blusa blanca con bordados extraordinarios alrededor del cuello.
Las tradiciones y costumbres que se preservan en la actualidad, sustentan su identidad étnica. Las prácticas rituales y creencias prehispánicas que aun llegan a nuestros días como vestigios de las fiestas y rituales de nuestras primitivas raíces indígenas que nos unían gracias a la geografía, la lengua, la historia de esta maravillosa cultura.
1-31 de Enero
Sentadas de niño
Lugar: Chiapas
2 de Febrero
La Candelaria
Lugar: Cintalapa, Chiapas
1-31 de Marzo
Carnaval Coiteco
Lugar: Ocozocoautla de Espinosa, Chiapas
20-27 de Abril
Feria de San Marcos
Lugar: Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
3 de Mayo
Santa Cruz
Lugar: Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
24-26 de Junio
Fiesta de San Juan Bautista
Lugar: Ocozocoautla de Espinosa, Chiapas
1-10 de Agosto
Santo Domingo
Lugar: Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
10-15 de Agosto
Feria de la Virgen de la Asunción
Lugar: Ocozocoautla de Espinosa, Chiapas
16-25 de Agosto
Feria de San Roque
Lugar: Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
13-16 de Septiembre
Fiestas patrias
Lugar: Chiapas
1-31 de Octubre
Bajada de las Virgencitas de Copoya
Lugar: Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
1-2 de Noviembre
Día de todos los Santos y Día de Muertos
Lugar: Chiapas
12 de Diciembre
Día de la Virgen de Guadalupe
Lugar: Chiapas
Chiapas sorprende por su biodiversidad, pero también es sorprendente por sus recursos naturales, así como por las posibilidades turísticas que se encuentran en sus grandes ríos, diversos lagos, majestuosas montañas y toda una multitud de canales y esteros en la costa, con rasgos propios que forman una intricada red de posibilidades donde la vida vegetal y animal ha encontrado los ambientes propicios para cada forma de vida representada en Chiapas.
Esta Región de México es una de las áreas con mayor biodiversidad alojada en una variedad de hábitats distribuidos en los numerosos ecosistemas. De ahí que se diga que, con excepción del desierto y las nieves eternas, todos los ambientes presentados en el territorio nacional se encuentran en esta maravillosa tierra, “Chiapas”.
En Tuxtla Gutiérrez es posible adquirir productos artesanales de todo el estado en las ramas de la textilería, la alfarería, la talla en madera, la cestería, entre otras. La tienda del Instituto Casas de las Artesanías de Chiapas es una buena opción para adquirir productos de alta calidad.
En los mercados tradicionales es posible adquirir diversas piezas de joyería en ámbar, la gema de Chiapas, además de artículos utilitarios de cuero o lata. Singulares artículos del arte popular propios de Tuxtla Gutiérrez son las coronas de cumpleaños, productos realizados en papel que se venden en los mercados y tiendas populares.
Por otra parte, se dice que Berriozábal es la cuna de los grandes maestros de la jarciería, técnica que consiste en la elaboración de las Hamacas, y este lugar a tan solo 20 minutos de la ciudad, uno podrá encontrar las Hamacas hechas por los sabios artesanos y de una calidad excepcional.
Mientras, que en Ocozocoautla de Espinosa se elaboran objetos de laudería, de singular belleza, como tambores, sonajas entre otras y la talla en madera elaboran máscaras para el carnaval zoque coiteco de los principales personajes; además de la elaboración de alfarería del vecino poblado de Ocuilapa que junto con Cintalapa producen cerámica de gran calidad.
De las haciendas, llegan hasta el presente muchas de las costumbres y tradiciones que forjan el alma chiapaneca. En ellas sonaron, armadas de nuevo por la memoria de los pueblos afroamericanos, las primeras marimbas, el instrumento icónico de Chiapas. El oeste de Chiapas es una tierra de sorpresas. Al lado de los elementos patrimoniales que se conservan de las haciendas que puntuaban los amplios valles agrícolas y ganaderos, se preservan elementos de los originarios zoques y se muestran prodigiosos naturales como el Cañón de la Venta y la Sima de las Cotorras. En términos gastronómicos, confluyen, como en la música, los elementos autóctonos de la milpa ancestral, con elementos europeos y africanos y aún asiáticos recientes. Es una tierra para disfrutar, por ejemplo, de los tamales en una variedad inusitada como los de chipilín o jacuané, acompañados por las notas de la marimba.
Hospedaje
Alimentos y Bebidas
Transportadoras
Agencias de Viajes
Arrendadoras